
Tenía en el radar la pelea: UFC 193, para los entendidos. Este es el gran crédito que le dan a Ronda Rousey: haber logrado que gente como yo se entere del evento, de la UFC, que uno lo quiera ver, lo quiera pagar y comentar. Algo pasó ese día y lo había olvidado, por suerte recordé a tiempo, varias horas antes. Era casi media noche en Centro América, en Australia era ya la madrugada del 15 de noviembre. Que hora tan rara e incómoda para pelear, pienso para mis adentros, como el eremita que soy.
Antes de comprar el Pay Per View: si Ronda gana van a ser 30 segundos muy caros, reflexionaba, con la tarjeta en mano. Tembloroso, como un suicida, como un pusilánime. Ví una o dos peleas previas y entonces inició la presentación del evento principal: Ronda Rousey vs Holly Holm. Todo bien orquestado, con intención y cadencia. Emocionante. Si hace falta una razón más para ver estos eventos es la producción.
El primer round lo ví tenso y los ojos bien abiertos. Ya se veía venir el desenlace, Holm estaba conectando todos los golpes y había daño visible. El segundo round: con la boca abierta. Contra todos los pronósticos Holly Holm estaba dando un gran espectáculo.
such an amazing... AMAZING shot.
@allelbows,
in the Focus, you reference someone, and a classical battle painting?
pic.twitter.com/pzwagHYEFq
— KingDazy (@kingdazy)
November 29, 2015
¡Que fotógrafa es Esther Lin! Ella publicó un recorrido muy conmovedor de todos los preparativos para la pelea hasta el final de la misma, todo con los justos dramas.
Esther Lin menciona en el video que comparto al final, al pintor francés Jacques-Louis David refiríendose a la imagen que ella capturó, y cómo la luz y la situación le recordaba a la capturada por el pintor francés.
If you don't believe you can win you've already lost. - Holly Holm
Eso es todo. Los quería alertar de esta transformación: Antes veía las artes marciales mixtas como violentas, cerraba los ojos, cambiaba el canal. Ahora estoy apreciando el atletismo y el aspecto mental de estos seres fabulosos.